ZONA PROTEGIDA

Ornitología

ÁREAS NATURALES

Hábitats & Ambientes Diversos

La importancia ornitológica del cono sur mallorquín es extraordinaria. Y
lo es por muchos motivos. Por ejemplo, por la cantidad y calidad de sus
aves marinas: en el cono sur mallorquín nidifican prácticamente la mitad
de todas las parejas reproductoras de gaviota de Audouin presentes
en Mallorca, así como poblaciones igualmente destacadas de paíño
europeo, pardelas cenicienta y balear, y cormorán moñudo.

También por sus poblaciones de rapaces, que incluyen águilas pescadoras,
halcones de Eleonor y halcones peregrinos. O por la gran cantidad y mejor
calidad de sus aves acuáticas, tanto en época reproductora (cigüeñuelas,
avocetas, chorlitejos patinegros, tarros blancos…) como durante el
invierno (flamencos, archibebes, andarríos, garzas…).

Pero cuando el espectáculo ornitológico alcanza su clímax es sin lugar
a dudas durante los pasos migratorios, que en el cono sur mallorquín
son especialmente notorios y diversos, consiguiendo atraer a miles de
aficionados a las aves en una migración paralela a la de las aves, que
les acerca a este lugar mágico desde países lejanos cada primavera y
cada otoño. Mosquiteros, currucas, alcaudones, papamoscas, tarabillas,
colirrojos, golondrinas, fumareles, combatientes, correlimos, aguiluchos,
alcotanes… la lista de especies migratorias parece inacabable y hace las
delicias de sus entusiastas seguidores.

Es por ello que prácticamente toda la región cuenta con diferentes figuras
de protección, desde un Parque Nacional hasta otras figuras autonómicas
y europeas. Sería el caso, por ejemplo, de las diferentes ZEPA (Zonas de
Especial Protección para las Aves) que se ubican de pleno en el cono sur
mallorquín, y que reflejan la enorme importancia de toda la zona para las
aves y su conservación.

ÁREAS NATURALES

La Observación de Aves

La observación de aves es una actividad tremendamente
placentera y casi adictiva, que no requiere apenas esfuerzos y en
cambio ofrece notables satisfacciones. Para el no iniciado, en cambio,
puede parecer una afición compleja y difícil, que requiere de grandes
conocimientos y material óptico avanzado. ¡Nada más lejos de la realidad!
Para disfrutar de las aves únicamente se requiere ilusión y ganas de
empaparse de naturaleza, vuelos y trinos. Eso, y una libreta de campo
para dejar constancia escrita de todo lo observado, escuchado y, en
definitiva, vivido. 

Evidentemente, resulta aconsejable contar con ópticas
adecuadas (prismáticos, telescopio, cámara fotográfica…), y con una
buena guía de identificación, pero nada de ello es imprescindible para
empezar a disfrutar de las aves silvestres.
Las aves, a diferencia de otros grupos animales, se dejan observar con
facilidad, por lo que invitan como pocos a su contemplación. En este
tríptico aparecen marcadas las mejores zonas para ir a contemplarlas.
Aves marinas, rapaces, aves acuáticas y forestales, aves de medios
agrícolas… todas ellas al alcance de su mirada, ¡al alcance de su ilusión!